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Analiza rol de la pandemia como acelerador de flexibilidad laboral

08 Mar.2022
Autor: UDEM
Créditos: Archivo UDEM
  • Ana Lucía Cepeda, fundadora y directora de Bolsa Rosa, ofreció la conferencia Flexibilidad híbrida y el futuro laboral, en formato virtual, organizada en forma conjunta entre la Universidad de Monterrey, a través del área de Educación Continua, y Beyond Work.


Dos años de restricciones por la pandemia aceleraron las tendencias en el mercado de trabajo y, ahora, entre los retos que enfrenta el sector para 2022, destaca el avance de la flexibilidad laboral, afirmó Ana Lucía Cepeda, en la Universidad de Monterrey. 

La fundadora y directora de Bolsa Rosa ‒nombrada por Forbes como una de las 100 mujeres más poderosas de México‒ destacó que otros desafíos, en este mismo ámbito, son el desarrollo y la atracción de talento cada vez más especializado, el cuidado de la salud mental y la adaptación a nuevas formas de trabajo a distancia  e híbrido, según estudios del Instituto Mexicano para la Competitividad. 

La especialista en temas de tendencias laborales en el país impartió el martes 22 de febrero la conferencia Flexibilidad híbrida y el futuro laboral, en formato virtual, organizada en forma conjunta entre la UDEM, a través del área de Educación Continua, y Beyond Work, que además se unieron para crear la opción académica de la certificación Experto Flexible. 

Cepeda señaló que la flexibilidad laboral ocupa ya el primer lugar entre las condiciones que más valoran las personas, según estudio de LinkedIn, citado en El Economista. 

La conferencista mencionó que el primer informe Perspectivas de flexibilidad laboral 2022, en donde participaron 181 empresas de México, arrojó como resultados que el 84 % de las organizaciones encuestadas siguen trabajando en esquemas flexibles: 42 % en esquema híbrido y 25 % trabajo remoto. 

Agregó que, en el 42 % de las empresas encuestadas, el personal administrativo trabaja flexible 70 % - 100 % y el 66 % de las corporaciones planean mantener la flexibilidad laboral permanentemente. 

“En los últimos cinco años ha estado en los top cinco o inclusive top tres de prioridades, pero ahora es el número uno, ya es un deber ser, (con trabajadores) orientados siempre a la productividad del negocio, a los objetivos de la empresa, del área y del puesto, esto no se elimina, al contrario, es una estrategia y debe ser usado como una ventaja competitiva”, expuso. 

DESAFÍOS PARA 2022 

La experta en flexibilidad laboral indicó que, después de dos años de pandemia, el trabajo híbrido es lo que va a permanecer durante este año, ya que más de la mitad de las empresas esperan que el 40 % de sus empleados continúen bajo este esquema de trabajo, según la Guía para planear la transición a un modelo híbrido de trabajo, de Manpower Group.  

“El híbrido tiene sus ventajas, sus retos (...) el punto es calificar por objetivos a la gente y no decir: ´le voy a dar la palomita a los que vengan más días y esa gente es la que tomo en cuenta’, no, se trata de mantenerlo por objetivos”, enfatizó. 

Para Cepeda, los beneficios al implementar el teletrabajo son ahorrar entre el 15 y 30 % del costo inmobiliario y el hecho de que el trabajo remoto aumenta la motivación de las personas, lo que mejora la productividad. 

“Entre los desafíos de esta dinámica laboral destaca el mantener el nivel de compromiso con los empleados, tener como prioridad el bienestar de los equipos, al prevenir el burnout y el estrés tecnológico, así como incrementar la flexibilidad en términos de días de trabajo, horarios y el sitio donde se labora”, sostuvo. 

La consultora estableció que, desde hace 10 años, la flexibilidad laboral es una tendencia y se sabía que llegaría un punto en el que sería algo normal, pero nunca imaginó que a raíz de una pandemia y que, ahora, no hay “vuelta atrás”.

Algo importante es el humanismo digital, en esta revolución se habla del human age, centralizar el recurso humano como eje de la empresa y hacer crecer la tecnología junto con el ser humano”, apuntó. 

NUEVA NORMALIDAD EN CONSTANTE CAMBIO

Cepeda afirmó que el COVID-19 exponenció y aceleró lo que ya se venía viendo en las tendencias: la transformación digital, el trabajo flexible, la economía del trabajo a destajo o gig economy, la analítica de información y datos, eliminar espacios de oficinas y tener más coworks.

Con la pandemia, lo que se desarrollaría en los siguientes cinco años, se materializó en tan solo un año, de acuerdo a la ponente. 

“Más que futuro, es el presente laboral lo que estamos viviendo ya; hace dos años empezamos con esta pandemia: al principio (de la contingencia), muchos de nosotros hicimos trabajo remoto y otros teníamos que ir presencial”, relató. 

Ahora estamos en ese acoplamiento de lo híbrido, hemos estado en constante cambio, no tenemos una estadía permanente, no sabemos cómo va a ser esa nueva normalidad, pero podemos darnos la idea de que la flexibilidad llegó para quedarse”, aseguró. 

Etiquetas: Conferencias

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